Yahya Jammeh -foto- es el presidente de Gambia y está en el poder desde 1994, cuando lideró un Golpe de Estado. Luego ganaría sucesivas elecciones sospechadas de fraude y también se lo acusa de restringir la libertad de prensa. Ahora, le ha llegado el turno al fútbol. Según el sitio África Top Sports, en los últimos días, 10 jóvenes fueron detenidos por la policía gambiana por jugar al fútbol en épocas de lluvias, lo que fue prohibido por el presidente. Las penas por este "delito" serían de entre 5 y 8 años de prisión.
Las detenciones se habrían dado en el distrito de Sami, en la Central River Region. El presidente Jammeh ordenó hacer cumplir la ley a los agentes, de detener a todos aquellos que se encuentren jugando al fútbol durante la temporada de lluvias, ya que por esa práctica los más jóvenes dejan de ayudar a sus padres en las tareas rurales.
Según fuentes del distrito de Sami, los jóvenes fueron detenidos cuando realizaban un entrenamiento en el campo de juego del pueblo. El periódico local Foroyaa da algunos nombres de los detenidos: Morikebba Diban, Burama Ceesay, Kemo Ceesay, Jammeh Jatta, Amadou Tungara, Bunja Tungara, Mamadou Jabbi, y Bunja Jabbi, entre otros.
Este accionar de las fuerzas policiales no es nuevo. Ya en agosto de este mismo año, 22 jóvenes y niños fueron detenidos y encarcelados por disputar un partido para festejar la fiesta musulmana de la Koriteh, que marca la finalización del mes del Ramadán.
Desde la dirigencia futbolística de Gambia se busca otro rumbo. La semana pasada, el Presidente de la Asociación Gambiana de Fútbol, Mustapha Kebbeh, visitó la sede de la FIFA en Suiza y dijo: “Hay muchos niños que podrían haber sido muy buenos jugadores, pero no lo son porque no gozan de oportunidades. Por tanto, queremos crear esas oportunidades no sólo para que desarrollen una carrera, sino también por diversión, salud y esperanza”. Sin embargo, con medidas como las de Jammeh será difícil que se logren mejoras en el fútbol de Gambia.
Este accionar de las fuerzas policiales no es nuevo. Ya en agosto de este mismo año, 22 jóvenes y niños fueron detenidos y encarcelados por disputar un partido para festejar la fiesta musulmana de la Koriteh, que marca la finalización del mes del Ramadán.
Desde la dirigencia futbolística de Gambia se busca otro rumbo. La semana pasada, el Presidente de la Asociación Gambiana de Fútbol, Mustapha Kebbeh, visitó la sede de la FIFA en Suiza y dijo: “Hay muchos niños que podrían haber sido muy buenos jugadores, pero no lo son porque no gozan de oportunidades. Por tanto, queremos crear esas oportunidades no sólo para que desarrollen una carrera, sino también por diversión, salud y esperanza”. Sin embargo, con medidas como las de Jammeh será difícil que se logren mejoras en el fútbol de Gambia.
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