martes, 17 de marzo de 2020

Un país, una historia: Burkina Faso

Si hablamos del fútbol juvenil en África inevitablemente los nombres de países como Nigeria o Ghana son referencia. En el último tiempo, Malí ha tenido buenas actuaciones aunque sin llegar a quedarse con títulos mundiales. 

A veces aparecen algunas sorpresas jugando campeonatos del mundo como Etiopía, Gambia o Sierra Leona . Como hoy nos ocupa Burkina Faso recordamos una de sus mejores actuaciones entre los seleccionados menores de 20 años. 
Fue en el Mundial Sub 17 de Trinidad y Tobago, en 2001, donde los pequeños Sementales especificaron la campaña ante seleccionados de la talla de España o Argentina.

Los buenos resultados se empezaron a dar dos años antes, cuando el Sub 17 llegó fue subcampeón en el Africano de la categoría -perdió 3-1 con Ghana en la final- y en 2001 en Seychelles fueron segundos de Nigeria. En estos resultados mucho tuvo que ver la academia “Planete Champion Internationale” y la elección de su director Jean-Michel Yameogo como seleccionador juvenil. “Conocía perfectamente a los jugadores y sus habilidades básicas, ya que los había guiado en varias fases de su desarrollo. Este conocimiento fue, indudablemente, el motivo de la coherencia y confianza del equipo, de su sólida técnica y disciplina ejemplar en el terreno de juego y fuera del mismo”, se remarca en el dossier de la FIFA sobre el Mundial de TyT.

Si la primera experiencia en Nueva Zelanda 1999 no había sido de las mejores y los burkineses terminaron décimos –triunfo ante Jamaica, empate con Paraguay y derrota con Qatar- en 2001 dejaron bien claras sus intenciones de buscar el triunfo absoluto desde su primer encuentro contra Argentina. Yameogo planteó un sistema 3-5-2, con tres hombres que marcaban en zona, apoyados por Gorogo en la vanguardia de la defensa. Madi Panandetiguiri y Wilfried Sanou eran sus principales figuras, siendo los pilares de la selección voltense. Panandetiguiri maniobraba con gran elegancia de movimientos y extraordinaria eficacia por la banda izquierda, alimentando a los delanteros liderados por Sanou y con el apoyo de Nikiema.

En el debut ante la Argentina de Tevez, Mascherano y Maxi López, entre otros, la presión alta en mitad de cancha junto con los veloces desbordamientos de Lassana Kanoute, en la derecha, y de Panandetiguiri, en la izquierda, pusieron en grandes apuros al conjunto argentino, que estuvo al borde de la derrota, pero un penal de López en los minutos del descuento, otorgó el 2 a 2 final a los sudamericanos.
En el Grupo C siguió la segunda fecha ante España –venía de vencer 2-1 a Omán- y fue triunfo burkinés por la mínima. El autor del 1-0 fue Sanou para imponerse a la Roja que contaba con Fernando Torres y Andrés Iniesta entre sus figuras. 

En su tercer encuentro se pudo notar un cierto aire de complacencia frente a un Omán en busca de su primer punto. A los jóvenes futbolistas de Burkina Faso les faltó la cohesión demostrada en sus primeros partidos y fueron reducidos a defender con uñas y dientes el empate para asegurarse un puesto en los cuartos de final. Su adversario en la segunda fase, Costa Rica, volvió a toparse con las auténticas cualidades del once africano: creatividad en la línea media, vertiginosos desbordamientos por los flancos y la versatilidad y eficacia de Sanou. Representó una actuación que reiteraba las ambiciones del conjunto voltense. Fue triunfo 2-0 con tantos de Sanou y Gorobo. 

La semifinal puramente africana entre Nigeria y Burkina Faso generó, en realidad, un encuentro insulso, ya que ambos equipos se mostraron muy parejos, sin capacidad de llegada masiva, neutralizándose por completo. Ninguna de las dos escuadras pudo exhibir su conocida habilidad, y fue únicamente un penal que liquidó el pleito a favor de la selección de Nigeria -gol de Opabunmi-. 

Si tuvieron que esforzarse a fondo en un angustioso encuentro contra sus rivales continentales, no fue así en el partido por el tercer puesto, en el cual dominaron claramente a la selección argentina (2-0 por Gorogo y Conombo). Los sudamericanos simplemente no supieron reaccionar ante las velocísimas incursiones de Panandetiguiri y Bamba por las puntas. Cuando salían a cortar dichos despliegues, dejaban grandes huecos en el centro por donde circulaban cómodamente Conombo y Sanou. Cabe destacar asimismo la excelente actuación del portero Kontougomde, quien fue uno de los pilares de la marcha triunfal de su equipo y se adjudicó merecidamente el premio JVC al mejor jugador del partido en el encuentro contra Nigeria.

En su segunda aparición, Burkina Faso demostró de forma impresionante que había aprendido mucho desde su debut en Nueva Zelanda, y que los programas de desarrollo del fútbol juvenil están dando ya frutos. La creatividad y la versatilidad del fútbol voltense entusiasmaron a los hinchas y los expertos en Trinidad.

Dos años después, con algunos nombres que se repitieron como Ouattara, Bouyain y Panandetiguiri, los chicos burkineses jugaron en Emiratos Árabes Unidos su primer -y al momento único- Mundial Sub 20 escalando hasta los octavos de final. Se sumó Aristide Bancé a ese grupo que dirigía el holandés Mart Nooij para ganar el Grupo A y luego quedar eliminados ante Canadá.  

Hubo que esperar hasta 2009 para que Burkina vuelva a un Mundial Sub 17. Y fue en el propio continente africano. Quedaron segundos del Grupo D hasta caer en octavos con España por un contundente 4-1 en el Estadio Sani Abacha de la ciudad nigeriana de Kano.
En la edición siguiente, México 2011, los Sementales llegaron como campeones continentales pero su actuación en el Grupo E fue decepcionante con tres derrotas (seis goles en contra y ninguno a favor) terminando últimos detrás de Alemania, Ecuador y Panamá. Aquella fue la última aparición de Burkina Faso en un Mundial Sub 17 masculino pero igualmente ocupa el puesto 29 en la tabla histórica solo por detrás de Nigeria (2°), Ghana (6°), Malí (13°) y Costa de Marfil (25°) entre los representativos africanos.

Como aliciente, en la CAN de Sudáfrica en 2013, y con algunos sobrevivientes del tercer puesto en Trinidad y Tobago 2001 como Panandetiguiri y Sanou, Burkina Faso culminó subcampeón igualando su anterior mejor actuación: también segundo en la CAN que organiza en 1998. Una muestra de que trabajan bien y conciencia desde las bases se pueden obtener grandes resultados.

Entregas Anteriores
1-Angola: El goleador Chico Gordo
2-Argelia: MC Alger Champions 1976
3-Benín: Vitalor Ligue 1
4-Botswana: Los estadios

2 comentarios:

DIEGO Martín YAMUS dijo...

Extraordinario Pancho, genial idea y cada vez más interesante, me encanta.

Anónimo dijo...

Grande Burkina Faso sé que en el 2026 van a clasificar a su primer mundial de mayores

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