[Vía Fifa.com] "¡Yo!" contesta por teléfono Emmanuel Mayuka cuando marcamos el número de su móvil. Pronto nos damos cuenta de que hemos pillado al internacional zambiano del Young Boys de Berna de muy buen humor y al volante de su auto. Se dirige a comer después de la sesión de entrenamiento matutina, pero accede de buena gana a entrevistarse con FIFA.com antes de su bien merecido almuerzo. "Ningún problema, adelante, disparen", nos pide nuestro alegre interlocutor.
El futbolista de 20 años tiene muchos motivos para estar contento. Porque tanto en el club en el que juega como en la selección de su país, las cosas marchan sobre ruedas. Zambia se halla en situación propicia de clasificarse para la Copa Africana de Naciones 2012, y el club de la primera división suiza en el que desempeña su oficio ha puesto rumbo a la Liga Europa de la UEFA.
Cualquiera diría que la buena estrella le ha seguido desde la cuna al joven zambiano, que ya a los 16 años despuntó en el horizonte futbolístico. A mediados de 2007 participó con la selección juvenil de su país en la Copa Mundial Sub-20 e impresionó no solo a los seguidores de la tribuna sino también al Grupo de Estudios Técnicos (GET) de la FIFA, que ya entonces formularon el siguiente veredicto: "Mediocampista muy activo y de alta aceleración, con buen regate y mucha correa".
Un primer traspaso a Israel
La opinión de los expertos se vería en efecto confirmada. Al cabo de tan solo un año como futbolista profesional en las filas del Kabwe Warriors, club de su localidad natal que competía en la primera división de Zambia, el artista adolescente fichó a los 17 años por el Maccabi de Tel Aviv del campeonato israelí. A primera vista, ese traspaso podría parecer arriesgado, tanto para la reputada entidad israelí como para el propio Mayuka, teniendo en cuenta las dificultades por las que puede atravesar un futbolista a una edad tan temprana tan lejos de su familia y de sus amigos.
Sin embargo, Mayuka se apresura a aclarar en su conversación con FIFA.com que los dos años que pasó en la metrópoli del Mediterráneo fueron una experiencia sensacional para él. "Tel Aviv es fantástica, una de las ciudades más maravillosas que he conocido. Cuando me mudé allí, no me daba por pensar mucho en mi patria. Yo sabía que el fútbol era mi oportunidad de hacer carrera. Para alcanzar ese objetivo, tuve que hacerme fuerte mentalmente", recuerda el delantero de sus tiempos en Oriente Próximo mientras al fondo se oye el sistema de estacionamiento asistido de su vehículo.
El próximo paso
Sus sólidas prestaciones en Israel, basadas según Mayuka en su "buen carácter y en la fe en Dios", despertaron el interés de otros clubes europeos. Así fue como el Young Boys de Berna entró en escena para anunciar en mayo del año pasado la contratación del joven promesa. Fue un acierto para ambas partes, como enseguida veremos.
Aunque Mayuka tuvo que soportar comparaciones con el ex romperredes del Young Boys Seydou Doumbia, el ariete de 1,79 metros de altura respondió a las altas expectativas del actual cuarto clasificado de la división de honor helvética con una solvente renta de goles. Nueve dianas en 27 partidos de liga dan prueba de las extraordinarias facultades del punta de 20 años.
Mayuka no tarda en encontrar la explicación para su formidable rendimiento a lo largo de su primer año en Suiza. "Mi equipo me puso las cosas muy fáciles para que me sintiera a gusto. Me encanta vivir y jugar al fútbol aquí", revela. "Da igual donde te fichen: un jugador debe saber adaptarse siempre a la cultura de su destino. Eso forma parte del oficio de futbolista", sentencia con el tono de un sabio trotamundos.
Soñando con el Teatro de los Sueños
A pesar de su corta edad, el muchacho tiene lo que hace falta para implantarse en un país, una cultura y un idioma ajenos. Y es esta mezcla de experiencia internacional, confianza en sí mismo y actitud despreocupada ante los desafíos diarios de la vida lo que le permite hablar a continuación de su mayor sueño. Ahora lo escuchamos mejor porque el ruido del motor ha dejado de sonar.
"Mi sueño es jugar en el Manchester United. Desde pequeño me ha fascinado el estilo de juego de ese equipo. Ese deseo no me deja en paz. Pero dedico toda mi concentración al Young Boys, con el que me gustaría ganar el resto de los partidos que nos quedan y jugar en la Liga Europa la próxima temporada", declara entusiasta.
En el Young Boys de Berna y últimamente también en la selección de Zambia, el delantero está demostrando una y otra vez que su ambición de fichar por el campeón histórico de la Premier League no es ninguna quimera. Sin embargo, para materializar esa meta aún le queda mucho trabajo por hacer tanto en Berna como en el once de su país en la palestra internacional.
Zambia va por buen camino
En el triunfo por 0-2 de Zambia en Mozambique a finales de marzo en la campaña de clasificación para la Copa Africana de Naciones 2012, nuestro hombre tuvo mucho que decir, pues marcó uno de los dos goles, y ahora rememora con placer el combate librado en Maputo: "Fue magnífico. Esa victoria fue enormemente importante para nuestro proyecto de conseguir el pase al torneo. Estoy muy contento de haber podido ayudar al equipo", comenta ilusionado antes de anticipar el choque de vuelta contra el mismo rival que se disputará a primeros de junio.
"Nos espera un encuentro difícil, pero el fútbol es el deporte número uno en Zambia y desde luego que podemos contar con el apoyo de nuestros seguidores. La clasificación para la prueba reina continental significaría mucho para toda la nación", observa este veterano de dos Copas Africanas de Naciones al despedirse mientras cierra la puerta de su coche. Mayuka parece tener hambre de más y a nosotros solo nos queda desearle: "¡Buen provecho!".
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