El goleador del Sevilla dialogó con El Imparcial en una interesante entrevista que aquí compartimos...¿Qué significa el fútbol para los jóvenes de Mali?
Para los jóvenes de Mali, y para los de toda África, el fútbol es un referente. En África se ama el fútbol y, además, para los más jóvenes supone una válvula de escape del duro día a día. También es un sueño para muchos, porque todo niño sueña con poder ser como los jugadores africanos que juegan en Europa.
¿Por qué decidió jugar para la selección nacional de Mali desechando la posibilidad de jugar con Francia en los grandes torneos?
Me siento muy arraigado a Mali. Mi padre supo inculcarme la cultura de su país y yo realmente me sentí desde siempre muy unido a Mali. Desde que conocí esa tierra, ese país, me enamoré, y la posibilidad de jugar con este país me sedujo. Además, he tenido la voluntad de hacer obras sociales allí desde hace mucho tiempo.
¿Qué sentía cuando jugaba para la selección de Mali?
Bueno, ya me he retirado, porque había que dejar paso a los más jóvenes. Pero cuando he jugado he sentido mucho orgullo. Por un lado, orgullo de defender a una nación, y por otro, responsabilidad, porque al fin y al cabo estaba representando a un país.
¿Cuál es el principal obstáculo para que un jugador de fútbol malí triunfe en el deporte?
Sobre todo son las circunstancias vitales. Es difícil porque faltan infraestructuras, formación, recursos…
¿Qué situación se encuentra en Mali cuando va a jugar con su selección nacional?
No voy a descubrir que Mali es uno de los países más pobres de África. Se vive una situación difícil, pero al menos hay una estabilidad que está permitiendo, poco a poco, mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos malienses. Para ello siempre hace falta más empeño y compromiso para cambiar las cosas de forma más eficiente.
¿Qué es lo más complicado para un futbolista profesional que ha triunfado en Europa cuando va a jugar a Mali?
En realidad, podemos hacerlo gracias a la pasión y el orgullo que ponemos. Uno se adapta a las circunstancias, pero es muy difícil.
¿La federación de fútbol de Mali apoya al deporte todo lo que debería?
Es difícil prestar todo el apoyo al deporte y al fútbol en un país con tantos problemas. Aún así, y sabiendo que todo es mejorable, se hacen cosas. La prioridad es mejorar la vida de la gente, pero también en el fútbol hay cosas que mejorar.
¿Qué significa la Fundación Kanouté para usted?
Para mí la Fundación es la certeza de que todos podemos hacer algo por los demás. En mi caso, me he centrado en el país de mi padre, que siento como propio, y en los que más sufren, que son los niños. Queda mucho por hacer, pero por algo se empieza.
¿Por qué decidió jugar para la selección nacional de Mali desechando la posibilidad de jugar con Francia en los grandes torneos?
Me siento muy arraigado a Mali. Mi padre supo inculcarme la cultura de su país y yo realmente me sentí desde siempre muy unido a Mali. Desde que conocí esa tierra, ese país, me enamoré, y la posibilidad de jugar con este país me sedujo. Además, he tenido la voluntad de hacer obras sociales allí desde hace mucho tiempo.
¿Qué sentía cuando jugaba para la selección de Mali?
Bueno, ya me he retirado, porque había que dejar paso a los más jóvenes. Pero cuando he jugado he sentido mucho orgullo. Por un lado, orgullo de defender a una nación, y por otro, responsabilidad, porque al fin y al cabo estaba representando a un país.
¿Cuál es el principal obstáculo para que un jugador de fútbol malí triunfe en el deporte?
Sobre todo son las circunstancias vitales. Es difícil porque faltan infraestructuras, formación, recursos…
¿Qué situación se encuentra en Mali cuando va a jugar con su selección nacional?
No voy a descubrir que Mali es uno de los países más pobres de África. Se vive una situación difícil, pero al menos hay una estabilidad que está permitiendo, poco a poco, mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos malienses. Para ello siempre hace falta más empeño y compromiso para cambiar las cosas de forma más eficiente.
¿Qué es lo más complicado para un futbolista profesional que ha triunfado en Europa cuando va a jugar a Mali?
En realidad, podemos hacerlo gracias a la pasión y el orgullo que ponemos. Uno se adapta a las circunstancias, pero es muy difícil.
¿La federación de fútbol de Mali apoya al deporte todo lo que debería?
Es difícil prestar todo el apoyo al deporte y al fútbol en un país con tantos problemas. Aún así, y sabiendo que todo es mejorable, se hacen cosas. La prioridad es mejorar la vida de la gente, pero también en el fútbol hay cosas que mejorar.
¿Qué significa la Fundación Kanouté para usted?
Para mí la Fundación es la certeza de que todos podemos hacer algo por los demás. En mi caso, me he centrado en el país de mi padre, que siento como propio, y en los que más sufren, que son los niños. Queda mucho por hacer, pero por algo se empieza.
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