“Mi contrato concluía después de este Mundial y no se prorrogará; como comprenderéis bien por qué. Es lógico, dado que no nos han salido bien las cosas en la Copa de África y tampoco en el Mundial. Nos hemos empleado a fondo durante dos años, pero desgraciadamente, mi historia con Costa de Marfil se detiene esta noche. He disfrutado muchísimo, y ha sido un gran orgullo representar a esta gran nación. El guión ha sido cruel, pero los griegos se han merecido su victoria. A un minuto escaso estábamos acariciando la hazaña, pero esos son los pequeños detalles de jugar al máximo nivel. Esto me deja una gran decepción y frustración”, fueron las palabras de Sabri Lamouchi tras la eliminación de Costa de Marfil del Mundial Brasil 2014. Por la tercera fecha del Grupo C, los Elefantes cayeron 2-1 con Grecia en el Estádio Governador Plácido Aderaldo Castelo de Fortaleza, y se despidieron por tercer Mundial consecutivo en la fase de grupos.
Hasta el minuto 90, Drogba y compañía se estaban metiendo en los octavos, pero un dudoso penal que marcó el ecuatoriano Carlos Vera en el suplementario, le dio la posibilidad a Samaras de poner el 2-1 y decretar la eliminación del segundo representante de África. Antes, en el primer tiempo y tras un error de Tioté, Samaris fue quien abrió la cuenta para los griegos.
En el complemento, Costa de Marfil salió en busca de la igualdad pero Grecia salía bien de contra y podría haber estirado la ventaja, sobre todo con un tiro de Karagounis que dio en el travesaño. Lamouchi puso todas sus cartas en el tablero y con el ingreso de Bony llegó el empate a quince minutos del cierre. Lo podría haber ganado en una contra de cuatro contra tres, pero Yaya Touré decidió definir cuando tenía pase y en la contra llegaría el dudoso penal.
De esta manera, los Elefantes se despiden de Brasil y desde la dirigencia deberán replantearse varias cuestiones. En primer lugar, tendrán que buscar un sucesor para Lamouchi que esté a la altura de las circunstancias y que tenga la capacidad y la confianza para llevar adelante un proceso a largo plazo en el que la Generación Drogba (Drogba, Kolo Touré, Boká, entre otros) deberá dar paso a los más jóvenes, liderados por Gervinho, Bony y Aurier, de los puntos más altos en Brasil.
Hasta el minuto 90, Drogba y compañía se estaban metiendo en los octavos, pero un dudoso penal que marcó el ecuatoriano Carlos Vera en el suplementario, le dio la posibilidad a Samaras de poner el 2-1 y decretar la eliminación del segundo representante de África. Antes, en el primer tiempo y tras un error de Tioté, Samaris fue quien abrió la cuenta para los griegos.
En el complemento, Costa de Marfil salió en busca de la igualdad pero Grecia salía bien de contra y podría haber estirado la ventaja, sobre todo con un tiro de Karagounis que dio en el travesaño. Lamouchi puso todas sus cartas en el tablero y con el ingreso de Bony llegó el empate a quince minutos del cierre. Lo podría haber ganado en una contra de cuatro contra tres, pero Yaya Touré decidió definir cuando tenía pase y en la contra llegaría el dudoso penal.
De esta manera, los Elefantes se despiden de Brasil y desde la dirigencia deberán replantearse varias cuestiones. En primer lugar, tendrán que buscar un sucesor para Lamouchi que esté a la altura de las circunstancias y que tenga la capacidad y la confianza para llevar adelante un proceso a largo plazo en el que la Generación Drogba (Drogba, Kolo Touré, Boká, entre otros) deberá dar paso a los más jóvenes, liderados por Gervinho, Bony y Aurier, de los puntos más altos en Brasil.
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