Marruecos, que ya estaba eliminada por sus caídas ante Irán y Portugal, cerró su participación en el Grupo B de Rusia 2018 y le hizo un gran partido a España. Hervé Renard puso en cancha a Munir; Dirar, Da Costa, Saiss, Hakimi; Amrabat, Boussoufa, El Ahmadi, Belhanda, Ziyech; y Boutaib.
Sobre el cuarto de hora, Boutaib aprovechó un error entre Iniesta y Sergio Ramos y se escapó solo para definir de caño ante la salida de De Gea. Los españoles alcanzaron la igualdad cinco minutos después por intermedio de Isco.
En el complemento, aunque el equipo de Hierro mantuvo la posesión y las mejores ocasiones, los Leones del Atlas se podrían haber puesto en ventaja con un tremendo derechazo de Amrabat que dio en el travesaño. Y sobre los 81 minutos, el ingresado Youssef En Nesyri puso las cosas 2-1 con un gran cabezado. Sin embargo, Iago Aspas (tras la intervención del VAR una vez en contra de los marroquíes) puso el 2-2 definitivo para que España se quede con la zona.
"Nos habría encantado ganar a España, y es a lo que vinimos hoy. Sufrimos, como sufre todo equipo que juega contra ellos, porque su alineación es una mezcla de jugadores del Real Madrid y el Barcelona, todos ellos excepcionales. Pero creo que se debería hablar de nuestros jugadores, de todo el equipo, por lo que han hecho en este partido y en este Mundial", manifestó el francés Renard en rueda de prensa.
De esta manera, a pesar del buen fútbol desplegado, Marruecos quedó muy lejos del sueño de emular a la generación del 86 que fue la única en superar la fase de grupos en cinco campeonatos del mundo. Además, es el tercer Mundial -junto con México 70 y Estados Unidos 94- que el seleccionado marroquí se va sin ganar encuentro.
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