La participación de los equipos africanos en el tradicional Torneo Esperanzas de Touoon llegó a su fin y fue Malí el que salió en defensa del fútbol africano. En el Grupo B, Guinea había perdido en sus dos primeras presentaciones y las fechas 3 y 4 no fueron distintas ya que fueron vapuleados por Inglaterra que los goleó 7-1 y cerraron con un 1-2 ante Japón, siendo el único equipo que no sumó siquiera una unidad.
Malí por su parte dejó una mejor imagen y siempre plantó dura batalla a sus oponentes. Tras el empate contra México por la segunda fecha del Grupo A, llegó el duelo ante el local y a pesar de la expulsión de Lassana Coulibaly pudieron ponerse en ventaja a través de Adama Niané. Pero no pudieron mantener la diferencia y los galos se llevaron el triunfo 2-1 gracias a los tantos de Thomas Robinet y Jonathan Bamba.
Y llegó la última fecha. Hasta allí, los representativos africanos sumaban seis derrotas y el empate de Malí ante los mexicanos. Pero las Águilas pudieron salvar el honor del continente y darle al menos una alegría en el torneo al vencer 3-1 a Bulgaria. Diadié Samassekou, en dos ocasiones, y Souleymane Diarra anotaron para el equipo de Fousseni Diawara, que al menos terminó tercero en su grupo, detrás de Francia y República Checa, contra los que perdió en partidos muy ajustados.
A pesar de los resultados, la posibilidad tanto para Guinea como para Malí de participar de un certamen de esta envergadura es de suma importancia y ayuda a muchos chicos a tener más roce internacional.
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