Los Purasangre, a todo galope

[Vía Fifa.com] A principios de este siglo, Burkina Faso poseía un “generación dorada” de jóvenes futbolistas con muchas ganas de demostrar su valía. La selección se clasificó para la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA en 1999 y en 2001, año en el que terminó tercera. En 2003, se convirtió en una de las representantes de África en la Copa Mundial Sub-20. Desde entonces, la contribución a la selección nacional absoluta de los jóvenes Purasangre probados con éxito en los escenarios internacionales ha despertado grandes expectativas, aunque en la clasificación para la Copa Mundial de la FIFA™ nunca habían conseguido, ni de lejos, emular aquellos éxitos. 

Actualmente, sin embargo, a la selección absoluta le falta un único partido para hacer historia y meterse en su primer Mundial absoluto. Burkina Faso aventaja a Argelia con el 3-2 registrado en casa en la ida de la eliminatoria, con muchas probabilidades de convertirse en el nuevo equipo revelación del occidente africano, esta vez en Brasil 2014. FIFA.com analiza la trayectoria de una selección que ha experimentado cambios espectaculares desde que se aupó al puesto 92º en la tabla mundial a principios de este año. En aquel momento, ocupaba el último lugar de su grupo de clasificación para el Mundial sin ningún punto en su casillero, a seis del líder, el Congo, y aparentemente descolgada de la competición. Todo eso cambió cuando los Purasangre ofrecieron su mejor participación en la Copa Africana de Naciones, celebrada en Sudáfrica entre enero y febrero. 

Golpe de timón 

Bajo la dirección del técnico belga Paul Put, el equipo se colocó primero de grupo, por delante de Nigeria, a la postre campeona, y de Zambia, defensora del título. A continuación, eliminó a Togo y Ghana en cuartos de final y semifinales respectivamente. El defensa Saidou Panandetiguiri, el único integrante habitual de Burkina Faso que formó parte de las selecciones sub-17 y sub-20 en los Mundiales respectivos, ha explicado que la situación dio repentinamente un giro de 360º justo después de la campaña en la máxima competición continental. "Después de Sudáfrica, donde disputamos la final contra Nigeria, empezamos a creer en nuestras posibilidades de clasificación para el Mundial. A pesar de que perdimos el encuentro decisivo, jugamos muy bien en todo el torneo, y eso nos dio mucha confianza. Nos dijimos que habíamos empezado con cero puntos en los clasificatorios para el Mundial, pero podíamos ganar [nuestros cuatro últimos] partidos".

"Nos presionamos a nosotros mismos y lo conseguimos. Ahora nos encontramos a 90 minutos de Brasil, y no podemos permitir que Argelia nos detenga. Lo daremos todo para clasificarnos, porque hemos llegado muy lejos partiendo desde cero puntos".

Aunque a los burkineses les basta el empate para meterse en Brasil, Panandetiguiri, a sus 29 años, dueño de más de 50 partidos internacionales en su haber y participante en 23 encuentros de clasificación para el Mundial en tres campañas, está convencido de que su equipo no irá a Argelia con un planteamiento defensivo. "Sería mala cosa plantarnos allí para conformarnos con el empate. Iremos a ganar. Se nos complicarían las cosas si nos replegáramos. Debemos jugar en su mitad del campo".

El polifacético defensa espera mucha rivalidad por parte de los veteranos de Sudáfrica 2010. "Sabemos que no será fácil, sabemos que tenemos que pelear, porque el partido contra Argelia será muy reñido. Los argelinos marcaron dos goles en Burkina Faso y saben que sólo les vale la victoria, pero nosotros somos un equipo duro de pelar y creo que podremos salir de Argelia con el resultado deseado".

Parece probable que los Purasangre jueguen la vuelta sin su delantero centro titular, Aristide Bance, miembro de la selección sub-20 en 2003 y autor del gol de la victoria en Uagadugú en la ida, de baja por lesión tras una fractura en el brazo. "Bance es un jugador excelente, como todo el mundo sabe. Pero si no puede jugar, no pasa nada, le buscaremos un sustituto".

Una ayuda para las nuevas generaciones
Panandetiguiri, quien ha militado en clubes de Alemania, Francia, España y Bélgica y, actualmente, engrosa las filas del Chippa United sudafricano, revela que los hombres más veteranos y expertos de la selección actúan de mentores con los más jóvenes. "Participar en los Mundiales Sub-17 y Sub-20 supuso una experiencia increíble, pero estoy convencido de que Brasil será todavía mejor. Siempre explico a los jóvenes qué ambiente se respira en un Mundial".

Sin embargo, también comenta la importancia de que los veteranos controlen las emociones de la plantilla. "Los jóvenes no deberían imponerse demasiada presión. Les pedimos que se relajen. Hay que disputar cada partido como hicimos en la Copa Africana de Naciones y así conseguiremos lo que nos propongamos. Si todo el mundo se pone a jugar como Maradona, no haremos nada. Para derrotar a Argelia, hay que ser uno mismo. Muchos miembros de nuestro equipo tienen experiencia en los grandes clubes europeos. Saben qué significa jugar al máximo nivel y, si queremos ir al Mundial, debemos actuar como los grandes futbolistas, sin dejar de trabajar en equipo".