El corazón del Coton Sport

[Vía Fifa.com] Hace un año, el francés Sébastien Desabre vinculaba su destino al del Coton Sport Football Club de Garoua. Una elección hecha con el corazón tanto por parte de este técnico enamorado de África como del club camerunés, que casi siempre ha recurrido a entrenadores franceses. El contrato de enlace preveía dos cláusulas: “Clasificarse para la Liga de Campeones, y acceder a la fase de grupos de dicha competición”, explicó Desabre a FIFA.com. “Ahora que esos dos objetivos se han cumplido, vamos a intentar acabar bien el año”. Y con ello, celebrar como es debido su primer aniversario…

Y es que, desde que se oficializó su unión en octubre de 2012, la pareja hace saltar chispas. El equipo de Garoua, que llevaba sin ganar títulos desde 2011, acaba de proclamarse campeón de Camerún por 12ª vez en su historia a las órdenes de Desabre. Además, el Coton Sport es el primer club camerunés que alcanza las semifinales de la Liga de Campeones africana en 5 años; desde la épica cabalgada del propio Coton Sport hasta aquella final perdida ante el Al Ahly. Un grande egipcio que precisamente será su rival en la penúltima ronda de esta edición de 2013…

“Creo que tendremos nuestras bazas que jugar”, analizó el entrenador de 37 años, que pasó los tres años anteriores dirigiendo al ASEC Mimosas marfileño. “Hicimos una buena campaña en un grupo bastante difícil, y muy homogéneo. Incluso el Espérance de Túnez lo pasó mal a veces. Debo precisar que, de los cuatro semifinalistas, somos con diferencia el que tiene el menor presupuesto”, añadió, orgulloso de las actuaciones de su equipo.

Tiene motivos para ello, pues, tras haber eliminado al AF Amadou Diallo marfileño en dieciseisavos de final (3-1 en el global de la eliminatoria) y haber despachado al Stade Malien en octavos (3-0), el conjunto de Garoua logró salir airoso de un complicado grupo en la liguilla. Si bien perdió sus dos encuentros contra el Espérance tunecino, se mantuvo invicto frente al Recreativo de Libolo y el Sewé Sport, con lo que obtuvo el pase a semifinales. “Lo que estamos consiguiendo este año es simplemente el fruto de un trabajo iniciado hace ya varios años”, analizó Desabre.

Desabre y sus jóvenes pupilos 

A la vista de la calidad de los jóvenes del equipo, el trabajo con la cantera está siendo ejemplar. Ya pudo verse un atisbo de ello en la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Colombia 2011, donde Emmanuel Mbongo causó sensación con los jóvenes Leones Indomables. El delantero del Coton Sport, entre otras cosas, permitió a Camerún dar la sorpresa ante Uruguay (1-0) en la primera fase, contribuyendo enormemente a clasificar a su país para los octavos. Kada Yougouda, de 19 años, y uno de los máximos goleadores provisionales de esta Liga de Campeones con 6 tantos, es otro ejemplo perfecto.

“El caso de Yougouda, efectivamente, es interesante, porque se incorporó muy joven al club y hoy juega en primera división. Al igual que Mbongo, se trata de jugadores que podrían, en su momento, expatriarse y marcharse a Europa”, apostilló Desabre. “Además, el Coton Sport es un club que vive en parte de la venta de jugadores, como Jacques Zoua (Hamburgo), Vincent Aboubakar (Lorient) o Edgar Salli (cedido al Lens por el Mónaco). Aquí los jóvenes se forman con muy buenas condiciones. Se les da enseguida su oportunidad en primera división. Tienen la posibilidad de disputar competiciones africanas y, por tanto, de codearse con un nivel internacional”.

“Aquí se confía en los jóvenes”, confirmó Mbongo, quien confiere a su joven entrenador “un papel de padre, educador y profesor, antes de ser un entrenador. Transmite mucho, habla un montón con nosotros, nos conjunta. Desempeña un papel muy importante en los buenos resultados de nuestro club”, recalcó, sin mostrarse especialmente sorprendido por la buena trayectoria del equipo en la Liga de Campeones: “¡Creemos en nuestro talento!”.

“Tener jóvenes jugadores es una ventaja, porque están llenos de ganas, de empuje, y son muy preguntones. Naturalmente, también hay algunos inconvenientes, como la falta de concentración y, por supuesto, de madurez. Pero con la sucesión de partidos de Liga de Campeones, aprenden deprisa”, observó Desabre, que también dispone de hombres más experimentados; algunos supervivientes de la final perdida en 2008, como el centrocampista Stéphane Kinguè Mpondo. “Y no hay que olvidar que también hay internacionales cameruneses, así como de Togo, República Centroafricana, Benín o Níger”, concluyó, feliz, el cabeza de la familia del Coton Sport.