[Vía El Enganche] La segunda jornada de actividad en la CAN 2013 mejoró notablemente el cerocerismo absoluto del estreno. Ghana partía una vez más como una de las grandes favoritas y, más allá de no dejar buena imagen, encarriló con mucha pegada un resultado que parecía ser definitivo con tantos de Badu y Asamoah en los últimos minutos de la primera mitad y los iniciales de la segunda. Sin embargo, Congo había sido más animosos y alegres en su planteamiento, recibiendo merecido rédito con una reacción doble que igualó su debut después de siete años de espera, consumando un punto con goles del capitán Mputu y de su estrella, Mbokani, de penalti. Grandes sensaciones congoleñas y debilidad defensiva inesperada en las Estrellas Negras (2-2).
La actividad se completó con Mali-Níger, que volvieron a la senda dubitativa de falta de ritmo, ocasiones dispares y excesivos temores por dejar espacios defensivos (1-0). Solo un fallo del portero nigerino que aprovechó en el tramo final el mítico Keita, rompió esa igualdad. Hermetismo que está empezando a ser habitual y que pone en peligro una de las grandes premisas del fútbol africano, la imprevisibilidad, que por ahora está brillando en los esquemas y planteamientos de la CAN 2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario