[Vía African Football Media] El año pasado, en el partido inaugural de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010, Siphiwe Tshabalala hizo historia. Transcurridos diez minutos de la segunda parte en el abarrotado estadio Soccer City, el extremo descerrajó desde la banda izquierda el disparo que abrió el marcador de aquella fase final.
Fue un gol fabuloso, vitoreado hasta la saciedad, que además llevó a su autor a la Gala del Balón de Oro de la FIFA a finales de aquel año en calidad de candidato al Premio Puskas al mejor gol de 2010. Ha pasado más de un año desde aquel momento que los aficionados sudafricanos recuerdan con tanto cariño, pero Tshabalala sigue revestido de la gloria que le confirió aquel tanto, retransmitido sin cesar por la televisión nacional. Actualmente, el jugador colabora con los Bafana Bafana en la fase de clasificación para la Copa Africana de Naciones 2012 y en los preparativos para la competición preliminar de Brasil 2014.
“Aquel gol me ha cambiado la vida. La gente me respeta ahora por haber participado en el Mundial y por el tanto que marqué. He vivido un año fantástico desde aquello y estoy disfrutándolo”, comenta Tshabalala, quien dentro de una semana cumplirá 27 años. “Ha sido el momento cumbre de mi carrera hasta el momento. Y luego está lo de diciembre. Es increíble para cualquier futbolista verse incluido en la lista de mejores goles del año, auparse hasta lo más alto y encontrarse bajo el mismo techo que las grandes estrellas del mundo. Me hizo muy, muy feliz formar parte de todo aquello”.
Según el sudafricano, desde entonces ha vivido un año casi perfecto con su club y con su selección nacional, sólo empañado por el hecho de que no se llegó a ultimar su traspaso al extranjero. “Aparte de no conseguir el fichaje, me ha ido a las mil maravillas y estoy muy contento”.
Entre los sudafricanos, sin embargo, Tshabalala triunfaba a lo grande antes de que su nombre se viera catapultado a la fama en el mundo entero cuando el balón se coló en la meta de México el 11 de junio de 2010. Al principio sorprendió la inclusión de su nombre en la selección de Sudáfrica que participó en la Copa Africana de Naciones 2006, y el muchacho llegó como un completo desconocido a aquella edición celebrada en Egipto, pero salió de allí convertido en un fijo del combinado nacional. Después disputó la fase final de Ghana 2008 y ahora confía en añadir a su palmarés una tercera participación en el certamen en Guinea Ecuatorial y Gabón, los dos países que organizarán la competición continental el próximo enero.
Sudáfrica se encuentra un punto por debajo de Níger en el grupo de clasificación. A principios del mes que viene, los Bafana Bafana intentarán imponerse a Sierra Leona en Puerto Elizabeth para tener la oportunidad de desbancar a los nigerianos. “Nuestro último partido lo jugamos en casa, y tenemos la obligación de ganarlo. Nosotros vamos a ganar, y no creo que ellos [Níger] consigan salir indemnes de Egipto”, vaticina.
Tshabalala, prácticamente un veterano, dueño de una potencia ofensiva impresionante en el último tercio del campo, figura en el grupo de hombres decisivos del equipo, encargados de garantizar el avance de la selección nacional en el campeonato continental. Sudáfrica conquistó el título en 1996 como nación anfitriona y se metió en semifinales en las dos ediciones posteriores, pero desde entonces no ha igualado ninguna de aquellas proezas. Además, se perfila ya en la distancia el camino hacia Brasil, donde los sudafricanos tratarán de llegar a su cuarta Copa Mundial de la FIFA en las cinco últimas ediciones, a costa de dos equipos que han crecido mucho en los últimos tiempos, Botsuana y la República Centroafricana, en el Grupo A.
“También debo ayudar al combinado nacional a clasificarse para Brasil 2014. Esperamos conseguirlo”, declaró. “Nuestro equipo puede lograr grandes cosas. Llevamos bastante tiempo jugando juntos y nos conocemos a la perfección. Creo que tenemos posibilidades de pasar a la siguiente fase [a fase final]. El objetivo consistirá en superar la primera ronda por primera vez. A partir de ahí, todo es posible”.
Tshabalala asegura también que le gustaría alcanzar el hito de 100 internacionalidades con Sudáfrica y jugar en un club extranjero. “Sigue formando parte de mis prioridades”, añade. Y luego está también el deseo de marcar el primer gol de la próxima fase final de la Copa Mundial de la FIFA...
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